jueves, 30 de abril de 2009

EL CHAT DE DIOS

Hola amigos

En estos tiempos la internet ha logrado globalizar las comunicaciones y es frecuente que muchas personas gasten grandes cantidades de horas en la "comunicación virtual". ¿Estarán bien invertidas esas horas de nuestras vidas?
Colosenses 4:5 Andad sabiamente para con los de afuera, aprovechando bien el tiempo.
Por otro lado, los temas de conversación son generalmente frívolos. ¿O tal vez somos mejores personar al salir del chat?
1 Corintios 15:33 No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.
Dios quiere comunicarse con nosotros. No a través de la red. Sino por su Palabra, la Biblia, y la oración. Y por cierto, que luego de conversar con Él no seremos las mismas personas.
Amós 5:4 Así dice el Señor al reino de Israel: "Búsquenme y vivirán."
Sus Palabras nos infundirán vida. Su Espíritu usará estas Palabras para limpiarnos, purificarnos y llenarnos de la vida que sólo Dios da.
Juan 6:63 El Espíritu da vida; la carne no vale para nada. Las palabras que os he hablado son espíritu y son vida.
¿Anhelamos conversar con Dios o preferimos las charlas inútiles con otras personas?
Salmo 27:8 El corazón me dice: «¡Busca su rostro!»Y yo, Señor, tu rostro busco.
Si no anhelamos la comunicación con Dios es porque nuestro espíritu está muerto o enfermo. Por eso con más razón acudamos a Él, pidamos perdón y que la sangre de Cristo derramada en la cruz no limpie de toda maldad. Sólo la comunión con Dios puede transformarnos para bien.
Juan 6:68 Simón Pedro le contestó: –Señor, ¿a quién podemos ir? Tus palabras son palabras de vida eterna.
Un abrazo a todos.
Rubén.

UNA MENTE BRILLANTE

Hola amigos

La película Una Mente Brillante (A Beautiful Mind) nos narra la historia de un gran matemático, John Nash, quien tuvo que aceptar y luego remontar su terrible enfermedad: la esquizofrenia. Su mente enferma le hacía ver personajes que sólo existían en su imaginación. Pero él, gracias a su inteligencia y la ayuda de su esposa, pudo ubicarse en la realidad, aunque nunca pudo erradicar completamente a estas personas ficticias de su mente.

Del mismo modo, este mundo alejado de Dios nos presenta un mundo de fantasía. Los valores, las necesidades y las prioridades no son las correctas. ¿Por qué? Porque la maldad del corazón humano les desvía de la verdad: Dios.

Romanos 1:28 Además, como estimaron que no valía la pena tomar en cuenta el conocimiento de Dios, él a su vez los entregó a la depravación mental, para que hicieran lo que no debían hacer.
Sólo Cristo, a través de su sacrificio en la cruz, puede transformar todo nuestro ser y podremos ver la realidad tal como es: tal como Dios lo ve. Así, nuestros valores, intereses, necesidades, etc. estarán correctamente centrados, pues seremos guiados por el Espíritu de Dios que nos lleva a toda la verdad.

Juan 16:13 Cuando venga el Espíritu Santo, él les dirá lo que es la verdad y los guiará para que siempre vivan en la verdad. Él no hablará por su propia cuenta, sino que les dirá lo que oiga de Dios el Padre, y les enseñará lo que van a pasar.
Si te arrepientes de tus pecados y confiesas a Cristo como tu Salvador, Dios te perdonará y mandará su Espíritu para darte una vida nueva. Recibirás la mente más bella que existe: la mente de Cristo.

1 Corintios 2:16 Pues la Escritura dice: "¿Quién conoce la mente del Señor?¿Quién podrá instruirle?" Sin embargo, nosotros tenemos la mente de Cristo.

Luego, acude a Dios cada día para que Él te enseñe el camino de la verdad y la justicia, y no dejes que el mundo te contamine con sus fantasías de maldad.
Salmo 32:8-9
8
El Señor dice: "Mis ojos están puestos en ti. Yo te daré instrucciones, te daré consejos, te enseñaré el camino que debes seguir.
9 No seas como el mulo o el caballo, que no pueden entender y hay que detener su brío con el freno y con la rienda, pues de otra manera no se acercan a ti."
El mundo sólo te alejará de Dios. Si sigues su pensamiento, tu vida será inútil y todo por lo cual te esforzaste será en vano.

1Juan 2:15-17
15
No améis al mundo ni nada de lo que hay en él. Si alguien ama al mundo, no tiene el amor del Padre.
16 Porque nada de lo que hay en el mundo —los malos deseos del cuerpo, la codicia de los ojos y la arrogancia de la vida— proviene del Padre sino del mundo.
17 El mundo se acaba con sus malos deseos, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
Un abrazo a todos
Rubén.

SÉ ESFORZADO Y VALIENTE

Hola amigos

Cierta vez el Señor Jesús narró la historia de un hombre que antes de partir de viaje repartió talentos a tres de sus siervos para que éstos los administrasen. Dio a cada uno según su capacidad: a uno encargó diez talentos, a otro cinco y a otro uno. Cada talento equivalía a una gran cantidad de monedas, por tanto este hombre puso una gran responsabilidad en cada uno de los tres siervos.
Cuando el hombre regresó pidió a sus siervos cuenta de los talentos. Aquel que recibió diez talentos había invertido y ganado diez talentos más, recibiendo así la aprobación de su señor. De igual modo el que recibió cinco talento ganó cinco talentos tras invertirlos y fue alagado también por señor. Pero, el siervo que recibió un talento había enterrado este talento y se limitó a devolverlo, sin ninguna ganancia, a su señor. ¿Cuál fue la razón? El TEMOR.
Mateo 25:24-25
24
»Después llegó el que había recibido sólo mil monedas. "Señor —explicó—, yo sabía que tú eres un hombre duro, que cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido.
25 Así que tuve miedo, y fui y escondí tu dinero en la tierra. Mira, aquí tienes lo que es tuyo."
Este siervo recibió la reprensión de su amo:
Mateo 25:26-27
26
Pero su señor le contestó: "¡Siervo malo y perezoso! ¿Así que sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido?
27 Debieras haber depositado mi dinero en el banco, para que a mi regreso lo hubiera recibido con intereses.
Es evidente que este siervo poseía los dos grandes defectos que conducen inevitablemente al fracaso: el temor y la PEREZA. La vida del hijo de Dios no está libre de retos y desafíos. Todo lo contrario, el Señor mismo quiere que alcancemos las metas (en todas las áreas de la vida) que Él ha propuesto para nuestras vidas. Pero debemos librarnos de estos lastres.

Hubo un hombre, Josué, a quien Dios le encargó la tarea de guiar al pueblo de Israel a conquistar la tierra de Canaán. La tarea no era nada fácil. Es por eso que Él mismo se da el tiempo de animarle.
Josué 1:9 Yo soy quien te manda que tengas valor y firmeza. No tengas miedo ni te desanimes porque yo, tu Señor y Dios, estaré contigo dondequiera que vayas."
El temor (llámese ansiedad, vergüenza, miedo al fracaso, etc.) nos paraliza. ¿Que nos manda Dios? TENER VALOR. Asimismo, la pereza (bajo la forma de desidia, indiferencia, desánimo, etc.) no nos permitirá culminar con la obra empezada. El mandato de Dios es PERSEVERAR, esforzarnos.

Ahora, tengamos cuidado. Dios le mandó estas cosas a Josué, porque ya le había prometido que siempre estaría de su lado. Su SEGURIDAD no estaría en sus fuerzas o habilidades, sino EN EL SEÑOR.
Josué 1:5... yo estaré contigo así como estuve con Moisés, sin dejarte ni abandonarte jamás.
Luego, Josué debía ser humilde para no confiar en su propio juicio. Sus oídos debían estar atentos a la Palabra de Dios. La SABIDURÍA necesaria para hacer frente a los problemas de la vida SÓLO VIENE DE DIOS.
Josué 1:8 Este libro de la ley no se apartará de tu boca, sino que meditarás en él día y noche, para que cuides de hacer todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino y tendrás éxito.
Estos grandes defectos (temor y pereza) no son parte de la vida que Dios nos dio en Cristo. Si has confiado en Cristo como tu Señor y Salvador, eres una nueva criatura. El Espíritu Santo que Dios envió a todos sus hijos nos da el valor y el esfuerzo para superar los obstáculos que se presenten en la vida y poder vencerlos en Cristo.

¿Como estamos administrando las riquezas que Dios nos ha dado? Él nos ha dado dones, habilidades, conocimientos, bienes, etc. para administrarlos en los diferentes escenarios de nuestra vida: el hogar, centro de estudios, el trabajo, la iglesia. ¿Estamos invirtiéndolos adecuadamente? Si es así recibiremos la aprobación de nuestro Padre al igual que los siervos diligentes de la historia que Jesús contó. ¿Es esta tu experiencia? De no ser así, acércate a Dios y confiesa tus faltas y fracasos, confía en Él y deja que su Espíritu te dé el valor y nuevas fuerzas a través de su Palabra, la Biblia.
Isaías 41:10 No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.

Isaías 40:29-31
29 El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas.
30 Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen;
31 pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.
Así alcanzarás tus objetivos y metas (espirituales, personales, familiares, laborales, sociales, etc). No aquellas metas propias de la naturaleza egoísta, sino las te trazaste en la voluntad del Señor.

Un abrazo a todos.
Rubén.

SALVACIÓN ¿POSIBLE O IMPOSIBLE?

Hola amigos

En nuestra vida es muy probable que nos encontremos con alguna persona que nos resulte particularmente insoportable. Ya sea por sus palabras, gestos, actitudes u otras cosas. Y decimos, explícitamente o en pensamiento, "esa persona nunca va a cambiar". Con esta frase lapidamos a tal persona.

Algo parecido sucedió en la historia de la mujer adúltera que los judíos trajeron delante de Jesús. Estos hombres, moralistas y justos a su propia vista, le dijeron a Jesús: "en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres: Tú, pues ¿qué dices? (Juan 8:5).

Jesús no cayó en su hipocresía moralista y respondió: "El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella" (Juan 8:7).

Todos se fueron y al final, mostrando su gran amor y misericordia, dijo a la mujer: "Ni yo te condeno; vete, y no peques más" (Juan 8:11)

Nosotros no somos nadie para condenar a otra persona. Ni con palabras ni con nuestros pensamientos. Dios quiere la salvación de todo hombre. Esta fue la razón por la cual murió Jesucristo, el justo, en la cruz. Esta salvación está disponible por la fe a todo aquel que se acerca a Dios en arrepentimiento. "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna." (Juan 3:16)

Habrá personas que nos parecerá que nunca podrán ser salvos. Pero, Dios no piensa lo mismo. Él se conoce a sí mismo y sabe cuán grande es su amor, poder y misericordia. No hay una vida que Dios no pueda rescatarla.

Lucas 18:26-27
26
Los que lo oyeron preguntaron: --Entonces, ¿quién podrá salvarse?
27 --Lo que es imposible para los hombres es posible para Dios --aclaró Jesús.
Dios quiere tu salvación, mi salvación y la de todos los hombres. ¿Compartimos este deseo con nuestro Señor?

Ezequiel 33:11 Diles: Vivo yo, dice Jehová el Señor, que no quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino, y que viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos; ¿por qué moriréis, oh casa de Israel?
No lapidemos a nadie. Dios quiere y puede salvar aún a aquellos que, en nuestro razonamiento finito, ya no tienen esperanza. El sacrificio de Cristo en la cruz fue perfecto para lograrlo. Es una gracia que Dios quiere dar a los que se acercan a Él por fe.

Efesios 2:8-9
8
Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios,
9 no por obras, para que nadie se jacte.
Un abrazo a todos.
Rubén.

miércoles, 29 de abril de 2009

PROHIBIDO DISTRAERSE

Hola amigos

Una de las principales causas de los accidentes de tránsito son las distracciones. Dejar de mirar por dónde se conduce, aunque sea muy brevemente, ha ocasionado muchas desgracias. Es preciso que el chofer esté alerta al camino.

De igual manera, la Palabra de Dios nos aconseja a no distraernos, y por el contrario nos insta a estar atentos.

1 Corintios 16:13 Manténganse alerta; permanezcan firmes en la fe; sean valientes y fuertes.

¿Por qué? Porque tenemos un adversario que buscará todas las formas para que cada cristiano no alcance los propósitos que Dios tiene para su vida. Se esforzará en lograr que el hijo de Dios no tenga una buena relación con su Padre y que no sea de bendición para otras vidas. Debemos estar atentos a no caer en sus mentiras, las cuales pueden ser muy sutiles. ¿Cómo reconocerlas? Conociendo la verdad, esto es, la Palabra de Dios.

1 Pedro 5:8 Sean prudentes y manténganse despiertos, porque su enemigo el diablo, como un león rugiente, anda buscando a quien devorar.

Debemos estar atentos también en no acomodarnos al pensamiento y forma de vida de esta sociedad llena de maldad. Este mundo está en total contraposición a lo establecido por el Señor. ¿Estamos pensando y actuando conforme a la voluntad de Dios? En su Palabra Él nos mostrará nuestra real condición.

Romanos 12:2 No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta.

1 Juan 2:15 No amen al mundo ni nada de lo que hay en él. Si alguien ama al mundo, no tiene el amor del Padre.

1 Juan 2:16 Porque nada de lo que hay en el mundo --los malos deseos del cuerpo, la codicia de los ojos y la arrogancia de la vida-- proviene del Padre sino del mundo.

Tampoco debemos olvidar que la vieja naturaleza pecaminosa luchará para dominarnos. Si cedemos a sus deseos terminaremos ofendiendo a Aquel que dio todo por amor a nosotros. Si somos de Cristo hemos muerto a esa naturaleza pecaminosa, no tenemos por qué obedecerla.

1 Pedro 2:11 Amados, yo os ruego como á extranjeros y peregrinos, os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma.

En estas luchas no podemos solos. La vida cristiana es victoriosa cuando la vivimos en total dependencia de Cristo, en amor y obediencia a su Palabra.

Juan 15:4 Sigan unidos a mí, como yo sigo unido a ustedes. Una rama no puede dar uvas de sí misma, si no está unida a la vid; de igual manera, ustedes no pueden dar fruto, si no permanecen unidos a mí.

Juan 14:23 Le contestó Jesús: --El que me ama, obedecerá mi palabra, y mi Padre lo amará, y haremos nuestra vivienda en él.

Ni el diablo, ni el mundo ni la carne pueden vencer a un hijo de Dios ha depositado su seguridad en el amor, poder y bondad de su Padre. Por tanto, es preciso que comprendamos lo vano que es confiar en nuestras propias fuerzas o habilidades para esta lucha.

Santiago 4:7 Así que sométanse a Dios. Resistan al diablo, y él huirá de ustedes.

Juan 16:33 Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo.

1 Pedro 4:1-2
1
Por tanto, ya que Cristo sufrió en el cuerpo, asuman también ustedes la misma actitud; porque el que ha sufrido en el cuerpo ha roto con el pecado

2
para vivir el resto de su vida terrenal no satisfaciendo sus pasiones humanas sino cumpliendo la voluntad de Dios.

No seamos como el chofer distraído. Fijemos nuestra mirada en Cristo, para que su victoria sea nuestra victoria. Dejemos atrás lo vano y caminemos cada día con Dios en Cristo.

Hebreos 12:2 Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de nuestra fe, quien por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios.

Mateo 24:35 El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras jamás pasarán.

Un abrazo a todos.

Rubén

DIOS NOS EXAMINA

Hola amigos:

El filósofo Sócrates decía 'conócete a ti mismo', y la mayoría estamos de acuerdo que el tener una idea objetiva de nosotros mismos es importante para avanzar en la vida.

Es así que el apóstol Pablo les dice a los cristianos de la iglesia de Corinto que se examinen para ver si la fe que ellos dicen tener es real.
2 Corintios 13:5 Examínense para ver si están en la fe; pruébense a sí mismos. ¿No se dan cuenta de que Cristo Jesús está en ustedes? ¡A menos que fracasen en la prueba!
El problema que encontramos en el camino es que no poseemos la capacidad para hacer tal autoanálisis. Nuestra naturaleza pecaminosa nos llevará hacia el error.
Salmos 19:12 ¿Quién se da cuenta de sus propios errores? ¡Perdona, Señor, mis faltas ocultas!
Jeremías 17:9
Nada hay tan engañoso y perverso como el corazón humano. ¿Quién es capaz de comprenderlo?
Pero, hay alguien que puede tener una percepción cabal de de nuestra persona: Dios. Puesto que Él nos creo y conoce aún los pensamientos, sentimientos e intenciones más profundas de nuestro ser. ¿Quién nos conoce?

Jeremías 17:10 Yo, el Señor, que investigo el corazón y conozco a fondo los sentimientos;
que doy a cada cual lo que se merece, de acuerdo con sus acciones.

En el libro de Apocalipsis, leemos una serie de mensaje que Jesucristo dio a las siete iglesias de Asia. En cada una de ellas dice lo siguiente: 'Yo conozco tus obras'.

En algunas iglesias habían cristianos que no andaban conforme a la voluntad de Dios, y el mensaje siempre era el mismo: 'arrepiéntete'. Es decir: 'date cuenta de tu error y regresa a mí a mis enseñanzas'.

Apocalipsis 2:5 ¡Recuerda de dónde has caído! Arrepiéntete y vuelve a practicar las obras que hacías al principio. Si no te arrepientes, iré y quitaré de su lugar tu candelabro.

Para aquellos que el Señor encontraba fieles, el mensaje era: 'continúa así'. Es decir: 'persistan en caminar tomados de mi mano'.

Apocalipsis 2:10 No tengas miedo de lo que estás por sufrir... Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

Apocalipsis 2:24-25
24
Ahora, al resto de los que están en Tiatira, es decir, a ustedes que no siguen esa enseñanza... les digo que ya no les impondré ninguna otra carga.
25 Eso sí, retengan con firmeza lo que ya tienen, hasta que yo venga.
¿Cómo está nuestra vida delante de Dios? Tal vez la percibas como buena o mala en mayor o menor medida. Pero, si Dios no te ha mostrado tu real situación, tu percepción de ti mismo será distorsionada. Pidamos a Dios que nos muestre nuestra verdadera condición.
Salmo 139:23-24
23
Oh Dios, examíname, reconoce mi corazón; ponme a prueba, reconoce mis pensamientos;
24 mira si voy por el camino del mal, y guíame por el camino eterno.

¿Qué usará Dios para enseñarte? Su Palabra. El Espíritu de Dios te convencerá de tus faltas a través de la Biblia. No busquemos la voz de Dios donde no está. Su Palabra es el mensaje eterno de Dios para los hombres:

2 Timoteo 3:16 Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia.
¿Conoces a Jesucristo como tu Salvador? Todo hijo de Dios tiene su Espíritu habitando en él. Este Espíritu le guía, enseña y corrige en todo momento. Si no tienes eso en tu vida, acércate a Jesús y clama por perdón. Sólo Él murió y resucitó para darte vida eterna.
Hechos 4:12 Sólo Jesús tiene poder para salvar. Sólo él fue enviado por Dios, y en este mundo sólo él tiene poder para salvarnos.
¿Eres hijo de Dios pero tu vida no glorifica a Dios? No sigas deshornando a Dios. Pide perdón a Dios y camina nuevamente con Jesús. Él no tendrá ningún reparo en perdonarte y restituir tu vida. El deseo de su corazón es que regreses a sus caminos y Él mismo ha dado grandes promesas a aquellos que se arrepienten.

Apocalipsis 3:20-21
20
Mira, yo estoy llamando a la puerta; si alguien oye mi voz y abre la puerta, entraré en su casa y cenaremos juntos.
21 A los que salgan vencedores les daré un lugar conmigo en mi trono, así como yo he vencido y me he sentado con mi Padre en su trono.
Un abrazo a todos.
Rubén.

DEDICANDO NUESTROS AÑOS A DIOS

Hola amigos

Hay una bella canción popular que en su letra dice "con los años que me quedan, los voy a dedicar a ti". Y habla de una pareja que quiere empezar de nuevo, olvidando el pasado y superando todos los errores.

De manera similar los hijos de Dios, guiados por su Santo Espíritu, anhelan dedicar sus vidas a su Padre Celestial. El apóstol Pablo expresa también este deseo cuando escribe su carta a los cristianos de Filipos, dándonos algunas pautas al respecto.

RECHAZAR COMPLETAMENTE LA VIDA FUERA DE CRISTO

La vida que a Dios le agrada es aquella en la cual Cristo es el Señor y Salvador. Cualquier otro tipo de vida, sea aparentemente buena o mala, sólo lleva deshonra a Dios. Pablo entendió esto de tal manera que menospreció la vida que tenía antes de conocer a Cristo, aún cuando ésta tenía abundante cultura, religión, moral y ética.
Filipenses 3:7-8
7
Pero todo esto, que antes valía mucho para mí, ahora, a causa de Cristo, lo tengo por algo sin valor.
8
... Por causa de Cristo lo he perdido todo, y todo lo considero basura a cambio de ganarlo a él
PERSEVERAR A PESAR DE LOS FRACASOS

Los fracasos temporales pueden ser superados cuando dejamos que el Espíritu de Dios nos fortalezca y corrija a través de su Palabra. El perdón y la restitución recibidos tras el arrepentimiento, nos sirven de aliciente para continuar puesto que en ellos comprobamos el amor, la fidelidad y la bondad de Dios para con nosotros.
Filipenses 3:13-14
13
Hermanos, yo sé muy bien que todavía no he alcanzado la meta; pero he decidido no fijarme en lo que ya he recorrido, sino que ahora me concentro en lo que me falta por recorrer.
14 Así que sigo adelante, hacia la meta, para llevarme el premio que Dios nos llama a recibir por medio de Jesucristo.
HACER DE CRISTO LA RAZÓN DE NUESTRA EXISTENCIA

¿Quieres dedicar tu vida a Dios? Entonces Cristo debe ser tu motivo de vivir y el servirle el mayor gozo de tu vida.

Filipenses 1:21 Porque para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia.
¿Te parece todo esto demasiado? Si es así debes buscar la salvación de Dios en Cristo inmediatamente, puesto que todo aquel que Dios ha engendrado como hijo tiene su Espíritu que anhela fervientemente por la comunión con el Señor.

Gálatas 4:6 Y porque ya somos sus hijos, Dios mandó el Espíritu de su Hijo a nuestros corazones; y el Espíritu clama: "¡Abba! ¡Padre!"
Romanos 8:9... El que no tiene el Espíritu de Cristo, no es de Cristo.
Los hijos de Dios desean ofrecer sus vidas a su Padre. Olvidemos los años de fracasos, dediquemos los años que nos quedan en esta vida a la persona que más no ama: Dios, con quien podremos estar por la eternidad, en Cristo.

Colosenses 3:3-4
3
pues ustedes han muerto y su vida está escondida con Cristo en Dios.
4 Cuando Cristo, que es la vida de ustedes, se manifieste, entonces también ustedes serán manifestados con él en gloria.
Un abrazo a todos.
Rubén.

domingo, 26 de abril de 2009

BABEL, EL FRACASO MUNDIAL

Hola amigos

Todos conocemos la historia de la torre de Babel. La humanidad postdiluviana había permanecido en un sólo lugar y querían levantar una edificación que demostrara la grandeza de esa sociedad. El Señor intervino confundiendo su idioma, que hasta ese entonces era único, y se así se cumplió lo establecido por Él, que el hombre debía poblar todos los confines de la tierra.

Génesis 11:8-9
8
Así fue como el Señor los dispersó por toda la tierra, y ellos dejaron de construir la ciudad.
9 En ese lugar el Señor confundió el idioma de todos los habitantes de la tierra, y de allí los dispersó por todo el mundo. Por eso la ciudad se llamó Babel.

Pero, a pesar de los miles de años que han transcurrido, el objetivo de reunificar la humanidad ha permanecido vigente. Algunos con ideales románticos sueñan con una hermandad de los hombres en un mundo de paz sin divisiones raciales, de ideología, de credo, de idioma, o de otro tipo. Otros, menos idealistas, buscan un gobierno mundial que controle la economía de toda la tierra. En fin, todo esto no es la voluntad de Dios.

Salmo 2:1-2
1
¿Por qué se sublevan las naciones, y en vano conspiran los pueblos?
2 Los reyes de la tierra se rebelan; los gobernantes se confabulan contra el Señor y contra su ungido.

No ha habido ni habrá ningún sistema humano que logre una unión mundial con justicia y paz. Sólo Jesús, el Rey de Reyes y Señor de Señores, lo hará cuando regrese a destruir todo este sistema de maldad para establecer su reino de justicia.

Isaías 9:7 Se sentará en el trono de David; extenderá su poder real a todas partes y la paz no se acabará; su reinado quedará bien establecido, y sus bases serán la justicia y el derecho desde ahora y para siempre. Esto lo hará el ardiente amor del Señor todopoderoso.

En ese día el mismo Señor reunirá a todos los redimidos con su sangre. No importa la raza, pueblo o nación. Serán reunidos todos aquellos que depositaron su fe en Jesucristo y en su obra en la cruz.

Isaías 43:6-7
6
Diré al norte: 'Devuélvelos', y al sur: 'No te quedes con ellos. Trae a mis hijos y mis hijas desde lejos, desde el extremo del mundo,
7 a todos los que llevan mi nombre, a los que yo creé y formé, a los que hice para gloria mía.'

No son salvos por sus acciones, sino porque reconocieron su miseria espiritual delante de Dios y clamaron por salvación a Él, depositando su confianza en el sacrificio de Cristo, quien murió para darles vida eterna.

Lucas 17:37 Le preguntaron entonces: --¿Dónde ocurrirá eso, Señor? Y él les contestó: --Donde esté el cadáver, allí se juntarán los buitres.

Si realmente eres de Cristo, algún día cantarás con todo tu corazón el siguiente canto:

Apocalipsis 5:9-10
9
Y todos ellos cantaban esta nueva canción: 'Sólo tú mereces tomar el libro y romper sus sellos. Porque fuiste sacrificado, y con tu sangre rescataste para Dios, a gente de toda raza, idioma, pueblo y nación.
10 Los hiciste reyes y sacerdotes para nuestro Dios; ellos gobernarán la tierra'.

¿Estamos preparados para el día del Señor?

Un abrazo a todos.

NOÉ Y SU GENERACIÓN

Hola amigos

El capítulo 6 del libro de Génesis nos narra una historia conocida por todos: el diluvio, Noé y el arca. Pero, ¿cual fue la razón para que Dios efectuara este juicio contra la humanidad? La maldad de esa generación. Era una sociedad organizada. Muy seguramente tenían una religión constituida, pero Dios no mira las apariencias sino el interior del hombre.

Génesis 6:5-7
5
El Señor vio que era demasiada la maldad del hombre en la tierra y que este siempre estaba pensando en hacer lo malo,
6 y le pesó haber hecho al hombre. Con mucho dolor
7 dijo: 'Voy a borrar de la tierra al hombre que he creado, y también a todos los animales domésticos, y a los que se arrastran, y a las aves. ¡Me pesa haberlos hecho!'

El dolor divino debió haber sido muy grande, puesto que Dios no hizo al hombre para que éste se hundiera cada vez más en la maldad. Todo lo contrario, lo hizo para que tuviera una relación perfecta de amor y comunión con Él. Tampoco los hizo para destruirlos. Pero toda esa gente no mostraba una pizca de arrepentimiento con la cual hubieran alcanzado misericordia.

Ezequiel 18:21-22
21
Y si el malvado se aparta de todos los pecados que cometía, y cumple todas mis leyes y hace lo que es recto y justo, ciertamente vivirá y no morirá.
22 Yo no volveré a acordarme de todo lo malo que hizo, y él vivirá por hacer lo que es recto.

En medio de toda esa sociedad hubo un hombre, Noé, a quien Dios en su amor, bondad y fidelidad extendió su gracia para él y su familia al guardarlos a salvo del juicio. ¿Por qué? Porque Noé mostró su devoción al Señor al vivir según sus decretos.

Génesis 6:9... Noé era un hombre muy bueno, que siempre obedecía a Dios. Entre los hombres de su tiempo, solo él vivía de acuerdo con la voluntad de Dios.

La humanidad no ha cambiado mucho a pesar de los siglos. Hoy, en el siglo XXI, tenemos una sociedad más moderna, con más tecnología; pero, en el interior el hombre sigue la misma tendencia al mal que caracterizaba a los hombres de la generación de Noé.

Romanos 1:21-22
21
Pues aunque han conocido a Dios, no lo han honrado como a Dios ni le han dado gracias. Al contrario, han terminado pensando puras tonterías, y su necia mente se ha quedado a oscuras.
22 Decían que eran sabios, pero se hicieron tontos.

La buena noticia es que hay una solución. Ya no es un arca, sino una persona: Jesús. En Él encontraremos la nueva vida que viene de Dios y podremos al fin escapar de nuestra maldad.

Juan 10:9 Yo soy la puerta: el que por mí entre, se salvará. Será como una oveja que entra y sale y encuentra pastos.

Jesús murió y resucitó para salvarnos de nuestro pecado. Aquel que se acerca a Él buscando el perdón, con la férrea decisión de abandonar la vida de pecado para vivir en adelante con el Señor, recibirá la salvación eterna. Ya no habrá más juicio ni condenación.

Romanos 8:1-2
1
Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús,
2 pues por medio de él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte.

En Jesucristo podemos estar en paz con nuestro Creador, alcanzando el objetivo que Dios tuvo para nosotros: una relación perfecta de amor, en esta vida y en la siguiente.

Juan 6:40 Porque la voluntad de mi Padre es que todo el que reconozca al Hijo y crea en él, tenga vida eterna, y yo lo resucitaré en el día final.

Esta es la esperanza tenemos los hijos de Dios.

Un abrazo a todos
Rubén

miércoles, 22 de abril de 2009

CÓMO ALIVIAR NUESTRA SED

Hola amigos

El apóstol Juan, en su evangelio, nos relata el siguiente ofrecimiento que Jesús hizo a los judíos:

Juan 7:37 En el último día, el más solemne de la fiesta, Jesús se puso de pie y exclamó: --¡Si alguno tiene sed, que venga a mí y beba!

Algunos pensadores han dicho que el hombre por naturaleza se encuentra en una constante búsqueda. Lo malo que es que no sabemos qué estamos buscando. Nuestra existencia como seres humanos parece incompleta, aún cuando intentamos llenarla con conocimientos, logros académicos, logros laborales, relaciones familiares o sociales, mejorando nuestro estatus económico, la religión, el sexo u otro tipo de cosas. Todas estas cosas no son malas en sí, pero no dan sentido completo a nuestras vidas. Nuestra búsqueda continúa por algo que alivie nuestra sed existencial. Pero, Dios desde siglos atrás viene ofreciendo al hombre la plena satisfacción para sus vidas:

Isaías 55:1 Todos los que tengan sed, vengan a beber agua; los que no tengan dinero, vengan, consigan trigo de balde y coman; consigan vino y leche sin pagar nada.

Esta insatisfacción existencial es resultado de la rebeldía ante Dios por parte de toda la raza humana. El hombre fue creado por Dios para vivir en comunión y armonía con Él. El pecado nos alejó del único Ser que podía llenar nuestras vidas. Pero, Jesús vino a dar solución al hombre y mediante su muerte y resurrección la reconciliación con Dios es posible. ¿Cómo alcanzarla? Lo primero que debes hacer es pedir perdón a Dios por una vida completamente alejada de Él. Reconoce a Cristo como tu salvador y Él te dará una nueva vida espiritual. Encontrarás así el reposo que tanto estabas buscando.

Hechos 3:19-20
19
Por eso, vuélvanse ustedes a Dios y conviértanse, para que él les borre sus pecados
20 y el Señor les mande tiempos de alivio, enviándoles a Jesús, a quien desde el principio había escogido como Mesías para ustedes.

2 Corintios 5:17-18
17
Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo!
18 Todo esto proviene de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo...

Este nuevo nacimiento implica también que Dios mismo, el Espíritu Santo, vendrá a ti para guiarte en tu vida y ya jamás se separará de ti.

Juan 7:38-39
38
De aquel que cree en mí, como dice la Escritura, brotarán ríos de agua viva.
39 Con esto se refería al Espíritu que habrían de recibir más tarde los que creyeran en él...

Esta nueva vida que viene de Dios fluirá en ti aliviando así tu sed y refrescando tu alma. Esto es lo que ofreció Jesús a la mujer samaritana y lo mismo que nos ofrece a cada uno de nosotros.

Juan 4:13-14
13
Jesús le contestó: --Todos los que beben de esta agua, volverán a tener sed;
14 pero el que beba del agua que yo le daré, nunca volverá a tener sed. Porque el agua que yo le daré se convertirá en él en manantial de agua que brotará dándole vida eterna.

Si ya has recibido el regalo de la salvación divina, busca a Dios cada día más. No retrocedas para seguir nuevamente el pensamiento de esta sociedad alejada de Dios. No caigas en su seducción pues al final sólo encontrarás frustración. No sigas sediento si ya tienes la fuente de la vida contigo. Que la comunión constante con el Señor, a través de la oración y de la Palabra, sea tu alimento y tu bebida diarias.

Juan 16:33 Les digo todo esto para que encuentren paz en su unión conmigo. En el mundo, ustedes habrán de sufrir; pero tengan valor: yo he vencido al mundo.

Por último, Jesucristo no nos prometió una vida sin dolor o sin problemas. Nos prometió su presencia cada día para ayudarnos y para darnos de su victoria sobre este mundo de maldad. Únete cada día más a Él y tu vida estará plena aún en medio de las circunstancias adversas que nos puedan sobrevenir. Fiel es el que nos hizo esta promesa:

Mateo 28:20
...Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.

Un abrazo a todos
Rubén.

LAMEC EL BÍGAMO

Hola amigos

El matrimonio es actualmente, en nuestra sociedad, cada vez más frágil. Pero esta no es la voluntad de Dios para la unión de amor, entre un hombre y una mujer, que Él mismo estableció en el Edén. El Señor resolvió la soledad de Adán al entregarle una mujer que procedía de su mismo cuerpo.

Génesis 2:22-24
22
De esa costilla Dios el Señor hizo una mujer, y se la presentó al hombre,
23 el cual, al verla, dijo: '¡Esta sí que es de mi propia carne y de mis propios huesos! Se va a llamar 'mujer', porque Dios la sacó del hombre.'
24 Por eso el hombre deja a su padre y a su madre para unirse a su esposa, y los dos llegan a ser como una sola persona.

Pero, luego de la desobediencia del hombre, sus descendientes emprendieron un camino de degradación y sus actos mostraban una maldad en aumento. Algunas generaciones después de Adán, encontramos a un Lamec, que en su soberbia y rebeldía, transgredió lo instituido por Dios.

Génesis 4:19 Y tomó para sí Lamec dos mujeres: el nombre de la una fue Ada, y el nombre de la otra Zila.

Este fue el comienzo de los males para el matrimonio, el resto sería sólo cuestión de tiempo. A Lamec no le importó la voluntad de Dios e hizo lo que bien le parecía y quiso así satisfacer sus deseos. De esta manera cómo despreció al Señor. Este es el actuar de una persona que obedece los deseos de su naturaleza pecaminosa, la cual no quiere ni puede obedecer a Dios.

Romanos 8:7-8
7
Los que se preocupan por seguir las inclinaciones de la naturaleza débil son enemigos de Dios, porque ni quieren ni pueden someterse a su ley.
8 Por eso, los que viven según las inclinaciones de la naturaleza débil no pueden agradar a Dios.

Jesucristo, con su muerte y resurrección puede limpiarnos y renovar nuestro ser, si nos acercamos a Él en fe y arrepentimiento. Dios nos dará una nueva vida de amistad con Él y podremos obedecerle como resultado de nuestra unión a Cristo.

Juan 6:40 Porque la voluntad de mi Padre es que todo el que reconozca al Hijo y crea en él, tenga vida eterna, y yo lo resucitaré en el día final.

Apocalipsis 1:5... Por medio de la muerte de Jesucristo, Dios nos ha perdonado nuestros pecados.

Los hijos de Dios, tenemos al Espíritu de Cristo habitando en nuestro ser. No tenemos por qué seguir los deseos de la naturaleza pecaminosa, podemos obedecer al Espíritu que nos llevará a una relación de amor con nuestro Padre Dios.

Romanos 8:9 Pero, si el Espíritu de Dios vive en ustedes, ya no tienen que seguir sus malos deseos, sino obedecer al Espíritu de Dios. El que no tiene al Espíritu de Cristo, no es de Cristo.

Romanos 8:14 Todos los que viven en obediencia al Espíritu de Dios, son hijos de Dios.

Dios nos muestra en su Palabra, la Biblia, su voluntad para toda las áreas de la vida: personal, familiar, social, laboral, etc. No tenemos que seguir el ejemplo de Lamec, en Cristo podemos encontrar la plenitud de la vida que Dios ha trazado para nosotros.

Juan 10:10-11
10
El ladrón viene solamente para robar, matar y destruir; pero yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.
11 Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas.

Un abrazo a todos
Rubén.

CAÍN Y ABEL

Hola amigos

El capítulo 4 de Génesis nos narra la conocida historia de los hermanos Caín y Abel. Caín, un agricultor, presentó a Dios lo mejor de sus productos, pero fue rechazado por Dios. Abel, ganadero, sacrificó al Señor la mejor de sus ovejas y recibió la aprobación divina. La razón de su aceptación es obvia: Abel actuó en justicia, es decir, según lo establecido por Dios. Caín, al contrario, no se conformó al mandato del Señor e hizo las cosas según su pensamiento.

Hebreos 11:4 Abel confió en Dios, y por eso le ofreció un sacrificio mejor que el de Caín. Por eso Dios consideró que Abel era justo, y aceptó sus ofrendas. Y aunque Abel ya está muerto, todavía podemos aprender mucho de la confianza que él tuvo en Dios.

Al igual que Caín, muchos de los que nos consideramos 'cristianos', tenemos una devoción a Dios según nuestro criterio. Creamos así un cristianismo a nuestra medida, basado en nuestra opinión y no en lo que Dios dice en su Palabra, la Biblia. Nos tratamos de convencer que para Dios lo más importante es la 'sinceridad'. Esta forma de pensar y actuar es mala ante los ojos de Dios. Si intentamos seguir al Señor según nuestro razonamiento, estaremos en el camino de Caín, siendo la consecuencia inevitable el rechazo por parte de Dios.

1 Juan 3:12 No seamos como Caín, que era del maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué lo mató? Pues porque los hechos de Caín eran malos, y los de su hermano, buenos.

Judas 1:11 ¡Ay de ellos!, porque han seguido el ejemplo de Caín...

Si decimos que somos cristianos, entonces debemos hacer las cosas según lo que Dios dice en su Palabra. Así, en primer lugar, todo hombre debe acercarse a Dios en busca de salvación a través del sacrificio de Cristo en la cruz, el único que murió y resucitó por nuestros pecados.

Hechos 4:12 Sólo Jesús tiene poder para salvar. Sólo él fue enviado por Dios, y en este mundo sólo él tiene poder para salvarnos.

1 Timoteo 2:5 Porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre.

Tal vez como hijos de Dios hemos estado sirviéndole según nuestros pensamientos. En nuestras mentes creemos que hemos realizado grandes acciones para Dios, pero preguntémonos: ¿fue Dios quien realmente nos llevó a hacerlas? A Dios no lo asombraremos con nuestras 'proezas', Él mira nuestros corazones. Si no hemos sido guiados por el Espíritu de Dios, hemos estando actuando en nuestra naturaleza pecaminosa. Si actuamos según esta vieja naturaleza jamás agradaremos a Dios, pero si somos guiados por el Espíritu estaremos siguiendo el camino que Jesús trazó para nuestras vidas.

Romanos 8:7-8
7
La mentalidad pecaminosa es enemiga de Dios, pues no se somete a la ley de Dios, ni es capaz de hacerlo.
8 Los que viven según la naturaleza pecaminosa no pueden agradar a Dios.

Gálatas 5:22-23
22
En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad,

23 humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas cosas.

El Espíritu de Dios producirá amor a Dios que nos llevará a ser humildes, mansos y obedientes al Señor. En este amor nos daremos cuenta que nada podemos hacer separados de Él, y que todo lo que hagamos lo debemos hacer bajo la dirección de Dios, siguiendo el ejemplo que nos dejó nuestro Señor Cristo Jesús.

Juan 15:4-5
4
Sigan unidos a mí, como yo sigo unido a ustedes. Una rama no puede dar uvas de sí misma, si no está unida a la vid; de igual manera, ustedes no pueden dar fruto, si no permanecen unidos a mí.
5 Yo soy la vid, y ustedes son las ramas. El que permanece unido a mí, y yo unido a él, da mucho fruto; pues sin mí no pueden ustedes hacer nada.

Colosenses 3:17 Y todo lo que hagan o digan, háganlo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios el Padre por medio de él.

Un abrazo a todos.
Rubén

lunes, 20 de abril de 2009

ASUMIENDO NUESTRA RESPONSABILIDAD

Hola amigos

Alguien dijo cierta vez, con mucho sarcasmo: "Errar es humano, echarle la culpa a otro es aún más humano."

Esta frase que nos suena a broma o a burla, es cierta. Aunque nos cueste admitirlo. En general, cuando cometemos un error somos propensos dar excusas, explicaciones e incluso a culpar a otros por nuestros fracasos: padres, maestros, colegas, a la falta de oportunidades, etc. Esta situación no es algo propio de nuestra sociedad moderna solamente, sino que es tan antigua como la humanidad.

Cuando nuestros primeros padres desobedecieron a Dios, en el huerto de Edén, trataron de excusarse culpando al otro de su error. Así Adán echó la culpa a su mujer Eva, e indirectamente responsabilizó a Dios por su pecado.

Génesis 3:11-12
11
Entonces Dios le preguntó: ...¿Acaso has comido del fruto del árbol del que te dije que no comieras?
12
El hombre contestó: --La mujer que me diste por compañera me dio de ese fruto, y yo lo comí.

La mujer, a su vez, quiso evadir su responsabilidad y echó la culpa a la serpiente.

Génesis 3:13 Entonces Dios el Señor le preguntó a la mujer: --¿Por qué lo hiciste? Y ella respondió: --La serpiente me engañó, y por eso comí del fruto.

Esta actitud no nos llevará a conseguir nada delante de Dios. De esta manera sólo tratamos de engañar a nuestras conciencias, pues a Dios jamás podremos engañar.

Gálatas 6:7 No crean ustedes que pueden engañar a Dios. Cada uno cosechará lo que haya sembrado.

Dios está presto a perdonarnos, pero nuestra actitud tiene que ser la correcta. Jesús murió en la cruz por nuestro pecado. Mediante su sacrificio podemos alcanzar el perdón de Dios, pero debemos acercarnos a Él en humildad, confesando nuestras faltas y con la firme decisión de dejar el pecado para seguir el camino de Dios.

Salmo 32:5 Pero te confesé mi pecado, y no te oculté mi maldad. Me dije: 'Voy a confesar mis transgresiones al Señor', y tú perdonaste mi maldad y mi pecado.

Pero, a veces hay pecados que están tan arraigados a nuestra vida que somos incapaces de identificarlos. O tal vez los identifiquemos, pero nos justificamos al compararnos con los demás. Nos decimos entonces: 'todo el mundo lo hace' o 'no tiene nada de malo'. Pero Dios sí puede reconocer cada una de nuestras maldades. Cuando nos enfrentamos a la Palabra de Dios, nuestro pecado se hace evidente. Cuando vamos ante Jesucristo, nuestra maldad es inexcusable. Por eso debemos ir constantemente a Él, y a su Palabra, para ser examinados y corregidos por Dios.

Salmo 139:23-24
23
Examíname, oh Dios, y sondea mi corazón; ponme a prueba y sondea mis pensamientos.
24 Fíjate si voy por mal camino, y guíame por el camino eterno.

Este es la actitud que nos llevará a una vida de bendición. Cuando entreguemos completamente nuestra vida a Cristo y dejemos el pecado para seguir las huellas de nuestro Maestro.

Salmo 32:1-2
1
Dichoso aquel a quien se le perdonan sus transgresiones, a quien se le borran sus pecados.
2 Dichoso aquel a quien el Señor no toma en cuenta su maldad y en cuyo espíritu no hay engaño.

Un abrazo a todos
Rubén.

MEDITEMOS EN LA VERDAD

Hola amigos

Dice la Biblia:

Filipenses 4:8 Por último, hermanos, piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que merece alabanza.

Pablo insta a los hermanos de Filipos a pensar, en primer lugar, en todo lo verdadero. ¿Podemos encontrar algo verdadero en un mundo lleno de maldad? Este mundo sin Dios está lleno de medias verdades, que es otra forma de decir mentiras.

Proverbios 10:18 El de labios mentirosos disimula su odio, y el que propaga calumnias es un necio.

La Palabra de Dios es la verdad. Es mediante ella que Dios se ha revelado a los hombres. Es esta Palabra la que nos presenta la salvación de pecados a través de Jesucristo.

Romanos 10:8-10
8
...Esta palabra es el mensaje de fe que predicamos.
9 Si con tu boca reconoces a Jesús como Señor, y con tu corazón crees que Dios lo resucitó, alcanzarás la salvación.
10 Pues con el corazón se cree para alcanzar la justicia, y con la boca se reconoce a Jesucristo para alcanzar la salvación.

La Palabra de Dios es usada por el Espíritu Santo para mostrarnos toda la verdad de Dios.

Juan 16:13 Cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a toda verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que dirá todo lo que oiga, y les hará saber las cosas que van a suceder.

La Palabra de Dios es el sustrato indispensable para el crecimiento del hijo de Dios, llevándolo, bajo la dirección del Espíritu de Dios, a la madurez espiritual.

2 Timoteo 3:16-17
16
Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia,
17 a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra.

La Palabra de Dios, cuando es estudiada, memorizada, meditada y aplicada a la vida del cristiano, lo llevará a la santidad, la cual es indispensable para vivir una comunión plena con Dios.

Juan 17:17 Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.

Hebreos 12:14 Busquen la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.

Mientras más nos acerquemos a la Palabra de Dios, la Biblia, más la valoraremos. Entonces, será toda una delicia para nosotros. Tal como lo dice el salmista:

Salmos 119:97-104
97 ¡Cuánto amo yo tu ley! Todo el día medito en ella.
98 Tus mandamientos me hacen más sabio que mis enemigos porque me pertenecen para siempre.
99 Tengo más discernimiento que todos mis maestros porque medito en tus estatutos.
100 Tengo más entendimiento que los ancianos porque obedezco tus preceptos.
101 Aparto mis pies de toda mala senda para cumplir con tu palabra.
102 No me desvío de tus juicios porque tú mismo me instruyes.
103 ¡Cuán dulces son a mi paladar tus palabras! ¡Son más dulces que la miel a mi boca!
104 De tus preceptos adquiero entendimiento; por eso aborrezco toda senda de mentira.

Un abrazo a todos
Rubén

domingo, 19 de abril de 2009

EL ARREPENTIMIENTO

Hola amigos

Todos los que nos consideramos cristianos hemos escuchado alguna vez la palabra arrepentimiento. Pero, ¿cómo la entendemos? El diccionario la define como 'pesar de haber hecho algo'. Esta definición se queda corta cuando vemos el uso que la Biblia le da a esta palabra. Veamos algunas consideraciones:

En primer lugar, ¿de qué nos vamos a arrepentir? De quebrantar los mandatos de Dios, es decir del pecado. Tal vez intentemos justificarnos comparándonos con los demás, pero ante la santidad de Dios no existe ningún argumento válido.

1 Juan 1:10 Si decimos que no hemos cometido pecado, hacemos que Dios parezca mentiroso y no hemos aceptado verdaderamente su palabra.

Debemos entender también que al transgredir sus mandatos le ofendemos. Cuando pecamos ponemos nuestro criterio o voluntad por encima de la sabiduría, la bondad, la justicia y el amor de Dios. Con nuestro mal proceder estamos denigrando la imagen de Dios en nuestra vida.

Salmos 51:4 Contra ti he pecado, sólo contra ti, y he hecho lo que es malo ante tus ojos...

Después, el arrepentimiento implica el darnos cuenta de nuestra miseria espiritual delante de Dios. El hijo pródigo cuando se encontraba cuidando cerdos, luego de malgastar su herencia, tomó conciencia de su estado miserable.

Lucas 15:17 Al fin se puso a pensar: ¡Cuántos trabajadores en la casa de mi padre tienen comida de sobra, mientras yo aquí me muero de hambre!

El arrepentido, entonces, decide volver a la casa de su Padre. Así, cuando entendemos nuestra estado espiritual lamentable, Dios se convierte en nuestra única esperanza.

Lucas 15:18-19
18 Regresaré a casa de mi padre, y le diré: Padre mío, he pecado contra Dios y contra ti;
19 ya no merezco llamarme tu hijo; trátame como a uno de tus trabajadores.

Entonces el arrepentimiento, que empieza con una decisión se traduce en una acción. No es sólo lamentarse por el mal. Es acercarse a Dios en humildad con la determinación de no ofenderle nuevamente para luego efectivamente corregir este mal proceder.

Proverbios 28:13 Quien encubre su pecado jamás prospera; quien lo confiesa y lo deja, halla perdón.

Por eso, no podemos decir que nos hemos arrepentido si nuestra conducta no ha cambiado. Lo único que hacemos de esta manera es engañarnos a nosotros mismos, pues a Dios jamás le engañaremos.

1 Juan 1:6 Si afirmamos que tenemos comunión con él, pero vivimos en la oscuridad, mentimos y no ponemos en práctica la verdad.

Pero, déjame decirte que si Cristo no habita y reina en tu vida, jamás podrás dejar de pecar y seguirás ofendiendo a Dios vez tras vez. Tú sólo no puedes corregir tu vida ante Dios. Necesitas la ayuda de Jesucristo, pues Él en la cruz hizo lo imposible para ti: consiguió reconciliarte con Dios el Padre. Confiesa tu pecado a Dios y reconoce a Jesús como tu salvador para recibir el perdón eterno.

Juan 3:16 Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.

Jesús, según su promesa, te perdonará y enviará a su Santo Espíritu para darte una nueva vida, espiritual. Es en este nuevo ser que eres en Cristo que podrás apartar el pecado de tu vida y tu comunión con Dios el Padre será cada vez más perfecta.

2 Corintios 5:17 Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo!

Si eres verdadero cristiano quiere decir que alguna vez te arrepentiste y decidiste dejar completamente la vida de pecado y enemistad con Dios, para vivir otra completamente diferente junto a Él. Esta vida es posible para cada hijo de Dios, en Cristo. Recuerda que eres un nuevo ser en Él, creado conforme a su imagen. El pecado ya no tiene poder sobre ti. Puedes vivir para dar alegría al corazón de tu Padre Dios, del mismo modo que lo hizo Cristo. Para lograrlo, llena tu mente y tu corazón con la Palabra de Dios, y que Cristo sea realmente quien reine en tu vida.

Salmos 119:9-10
9 ¿Cómo puede el joven llevar una vida íntegra? Viviendo conforme a tu palabra.
10 Yo te busco con todo el corazón; no dejes que me desvíe de tus mandamientos.
11 En mi corazón atesoro tus dichos para no pecar contra ti.


Un abrazo a todos
Rubén.

CORAZONES ROTOS

Hola amigos

Uno de los símbolos muy conocidos por aquellos que han (o hemos) sufrido una desilusión amorosa es el corazón roto o quebrado. Pero, nuestro corazón puede quebrarse por otros motivos también, como por ejemplo la enfermedad o la muerte de un familiar.

Resulta que Dios utiliza estas circunstancias para acercarnos a Él. Nosotros, en nuestra soberbia, le damos poca importancia al Señor cuando el viento sopla a nuestro favor. Pero cuando fracasamos, nuestra alma es capaz de humillarse delante de Dios. Esta es la actitud que Dios espera de nosotros.

Salmos 34:18 Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de espíritu.

Si tu corazón ha sido roto, por la razón que fuere, acércate a Dios en humildad reconociendo tus faltas. Confiesa a Jesús como tu Salvador para que puedas así alcanzar la salvación eterna que Dios te ofrece.

Juan 6:40 Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquél que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.

Si has estado siguiendo al Señor pero has fracasado en el camino, arrepiéntete y acércate al único que puede sanar tu corazón enfermo: Jesús, quien murió y resucitó por ti.

Hebreos 4:15-16
15
Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.
16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

Jesús es Aquel al que Dios le dio la tarea de sanar los corazones rotos.

Lucas 4:17-19
17
Y se le dio el libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el libro, halló el lugar donde estaba escrito:
18 El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos;
19 A predicar el año agradable del Señor.

Por último, Dios nunca te rechazará si luego del fracaso te acercas a Él en humildad para pedir perdón.

Salmos 51:17
Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.


Un abrazo a todos.
Rubén