LA CEGUERA ESPIRITUAL

Hola amigos

La ceguera es una condición que, a veces, puede tener aspectos positivos. Cuando ocurre en edades tempranas puede hacer que la persona agudice sus habilidades musicales. Podemos mencionar, entre los más conocidos, a Ray Charles, José Feliciano o Andrea Bocelli.
Pero en la mayoría de casos es una limitación. Por ejemplo, para muchas profesiones. A nadie se le ocurriría poner a un ciego a dirigir el tránsito o un partido de fútbol. Sería un desastre.

Dios, en su Palabra, nos dice que además de la ceguera natural existe también la ceguera espiritual. Y ésta es la situación de la mayoría de personas. No pueden percibir realmente a Dios.

1 Corintios 2:14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.

Alguien podrá negar esto y decir: "Yo creo en Dios, no estoy ciego". Sus acciones demostrarán si esto es cierto. El que ha conocido a Dios, ha recibido el verdadero amor y puede compartirlo con los demás. De no ser así, esta persona se engaña y sigue ciega.

1 Juan 2:9-11
9 El que dice que está en la luz, y aborrece a su hermano, está todavía en tinieblas.
10 El que ama a su hermano, permanece en la luz, y en él no hay tropiezo.
11 Pero el que aborrece a su hermano está en tinieblas, y anda en tinieblas, y no sabe a dónde va, porque las tinieblas le han cegado los ojos.

Jesús, la luz del mundo, vino a sacarnos de este estado de ceguera espiritual para que podamos establecer una relación de amor con Dios, esto es, la vida eterna.

Juan 12:46 Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas.

Lo primero que debemos hacer es reconocer nuestra situación delante de Dios: la de unos seres totalmente miserables espiritualmente. Jesús vino a salvarnos, pero si negamos nuestra ceguera, no podremos recibir su sanidad.

Juan 9:41 Jesús les respondió: Si fuerais ciegos, no tendríais pecado; mas ahora, porque decís: Vemos, vuestro pecado permanece.

La gran mayoría de personas están ciegas delante de Dios. Y lo peor de todo, no ven la solución que Dios ofrece a través de Jesucristo. Prefieren creer las mentiras de Satanás, el dios de este sistema mundano de maldad.

2 Corintios 4:4 Pues como ellos no creen, el dios de este mundo los ha hecho ciegos de entendimiento, para que no vean la brillante luz del evangelio del Cristo glorioso, imagen viva de Dios.

Acude a Cristo hoy, cree en él y recibirás la salvación que él ofrece. Él murió y resucitó para darte un vida de compañerismo con Dios. No tienes por qué seguir ciego, en tinieblas. La luz y amor de Dios pueden venir a tu vida y luego la podrás compartir a los demás.

1 Juan 4:10 El amor consiste en esto: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros y envió a su Hijo, para que, ofreciéndose en sacrificio, nuestros pecados quedaran perdonados.

1 Juan 3:14 Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte.

Un abrazo a todos
Rubén.